El quadern dels periodistes apocalíptics, integrats, optimistes i/o solidaris

EL QUADERN DELS PERIODISTES APOCALÍPTICS, INTEGRATS, OPTIMISTES I/O SOLIDARIS

24 ene 2025

“Avanzamos” con alegría hacia el cretinismo global

Dardo Gómez
No recuerdo si se trataba de una humorada o de una parodia para reflejar la insolencia de la ignorancia, pero alguna vez me hablaron de alguien que se negaba a leer libros para preservarse en sus esencias y labrarse un pensamiento libre de influencias extrañas. No sé si habrá existido sujeto tan torpe que pudiera renunciar a la memoria de la humanidad y al conocimiento que podía heredar de millones de personas que, a lo largo de milenios, habían labrado el pensamiento de la humanidad.

En primera instancia esto puede causar risa, quizá acompañada de
Zuckerberg (Meta), Lauren Sánchez (pareja de Bezos),
Bezos (Amazon), Sundar Pichai (Google) y Musk (X),
durante la toma de posesión de Trump.
pena por el desgraciado; pero cuando una barbaridad como esta se instala en el discurso de parte de la ciudadanía y es proclamada por dirigentes notables de nuestra sociedad a mí me produce un temor tremendo.

Esto viene a cuenta de que el pope de Facebook ha anunciado que para “volver a las raíces” ha decidido prescindir de toda verificación profesional de la información en sus redes y confía en sus clientes la veracidad de los contenidos de sus redes. Es decir, que entiende que no hay por qué poner freno a la mentira.

Pueden llamarles 'fake news', noticias falsas, posverdad u otros sinónimos igualmente perversos, pero son simplemente mentira; término siempre emparentado al engaño, la estafa, la falsedad o la difamación en todos las culturas y que siempre ha significado una bajeza ética.

En estos momentos, la mentira diseñada y dirigida de forma artera hacia la sociedad persigue fines asociales, porque su intención final es que no sepamos distinguir entre lo correcto y lo que no lo es. Si estos propagandistas del engaño consiguieran incapacitarnos para diferenciar lo que es verdad de lo que es falso acabaríamos construyendo una sociedad de cretinos.

Repito que esto me produce un tremendo temor porque dos personajes nefastos y de tremendo poder han convertido a sus plataformas de comunicación en los mayores altavoces de destrucción del conocimiento humano y exaltación de la ignorancia. Me refiero, como es obvio, a los magnates de las redes sociales Mark Zuckerberg y Elon Musk, propietarios de armas de desinformación masiva. El primero como amo de Facebook, Instagram, WhatsApp, Messenger Live y Threads, más casi una veintena de productos y servicios, incluidos Facebook Messenger, Facebook Watch y Facebook Portal.

Mientras que Musk, ya autoproclamado líder de la ultraderecha internacional, es el dueño de X (antes Twitter), plataforma que en 2024 ha puesto al servicio de la candidatura de Donald Trump. Sugieren los expertos que el algoritmo de recomendaciones de la plataforma pudo haberse modificado de manera selectiva para favorecer la visibilidad de contenido republicano. Lo que entonces se planteó como una duda sobre la neutralidad de la plataforma se ha visto plenamente confirmado con el anuncio de que el dueño de X será miembro de la administración Trump en su regreso a la Casa Blanca. Este fenómeno resalta la problemática de la influencia que las redes sociales pueden ejercer en el discurso público y en la construcción de la opinión de los usuarios.

No se confundan, estos son los malos


Rubén Sánchez, portavoz de la oenegé Facua – Consumidores en Acción ha sido entrevistado en 'Publico.es' en razón de la publicación de su libro 'Bulos: manual de combate', en el que analiza su activismo contra las noticias falsas y la desinformación en plataformas como Facebook, Instagram y X; al tiempo que recuerda sus luchas judiciales contra políticos, empresarios y agitadores de extrema derecha.

A lo largo de la entrevista Rubén Sánchez deja perlas como las que copio a continuación y que muestran cuales son los riesgos del poder en mano de estos personajes:

“Lo que mueve a Elon Musk y Donald Trump es el dinero, más allá de su ideología racista, homófoba y machista. Y lo que pretenden es llevar al poder a líderes de extrema derecha a través de la desinformación, buscan una injerencia clara en la política europea. Esto es un problema y algunos dirigentes han empezado a denunciarlo, pero de forma tímida. Tenemos que ser más contundentes, intervenir el algoritmo y monitorizar el funcionamiento de las redes para evitar que favorezcan determinados tipos de mensajes”.

El portavoz de Facua también ha hablado de los peligros para la libertad y la democracia que representa el monopolio desregulado de las redes sociales.

“La injerencia extranjera y los propietarios de las grandes plataformas acaban condicionando la opinión pública y esto puede provocar cambios en los comportamientos electorales en cualquier país del mundo. Esto quiere decir que el resultado de las elecciones en España puede estar en manos de Elon Musk y Mark Zuckerberg, porque fomentan con sus algoritmos que la gente vea lo que ellos quieren mostrar: mentiras y falsedades, mensajes destinados a aupar una ideología concreta”.

Engañosa defensa de la libertad de expresión


Derechos como la “libertad de expresión” y el supremo de la libertad individual han sido prostituidos por los voceros oficiales de la derecha más conservadora e invasora de esos valores. Así es como Giorgia Meloni o Viktor Orbán, justifican la persecución de los migrantes por la defensa de las libertades de italianos y húngaros que estos lunáticos sienten amenazadas por las personas de otras culturas. El esperpento rioplatense de Javier Milei enardece a sus seguidores con el grito de “Viva la libertad, carajo” y la formación de descerebrados que lo aupó al poder se denomina La Libertad Avanza.

Tres supuestos libertarios que admiran a genocidas y que consideran arbitrarias todas las formas que los seres humanos nos dimos, a través de los siglos, para protegernos y proteger a nuestros semejantes. Sobre todo a los más débiles o a los que más necesitan, porque no existe la libertad sin solidaridad y no hay democracia si ésta no ofrece protección a la ciudadanía.

Este enero el magnate Mark Zuckerberg ha anunciado que sus plataformas no están dispuestas a incorporar las prácticas reguladoras, demandadas por los expertos mundiales y los Estados democráticos, que deben servir para poner freno a los bulos, la desinformación y los discursos de odio. Desde ya, Facebook, Instagram y Whatsapp, han suplantado sus sistemas de verificación de datos por un nuevo sistema tan laxo y poco fiable como el que ya ha adoptado la X de Musk.

Para Zuckerberg ya “es hora” de “volver a las raíces” y de plantar cara “a los Gobiernos (que) han presionado cada vez más para censurar contenido”. Y declamado: “Vamos a eliminar a los verificadores de datos y sustituirlos por un sistema de notas comunitarias, similar al de X comenzando en Estados Unidos”. Y explicó que, según su opinión, que como tras la victoria electoral de Trump en 2016, los medios tradicionales insistieron en que la desinformación era una amenaza para la democracia, en sus redes están intentando abordar estas preocupaciones de buena fe, pero los verificadores de datos han resultado ser demasiado sesgados en política y han destruido más confianza de la que han generado, especialmente en Estados Unidos. "En los próximos meses, implementaremos un sistema más integral de notas comunitarias".

Este miserable no sólo se nos mea encima sino que pretende engañarnos con el bulo de que es agua bendita... ¡Que alguien nos pille confesados!

16 ene 2025

Comunicat de dones periodistes en suport del César

El 10 de gener passat es va difondre la notícia d'una trobada de dones periodistes en què es denunciaven i analitzaven agressions sexuals i abusos de poder a l'àmbit professional.

En una piulada, es va qüestionar l'honorabilitat del nostre company César [López Rosell] en relació a un suposat comportament datat a mitjans dels anys 80 a la redacció d''El Periódico'.

Les signatàries d'aquest text, convençudes de la importància d'aclarir
L'anterior redacció d'El Periódico',
on va treballar molts anys César López Rosell.

qualsevol situació d'abús als mitjans, independentment del temps transcorregut, volem manifestar que mai vàrem veure cap conducta reprotxable per part del César, qui fou cap de moltes de nosaltres.

Durant la seva llarga trajectòria, es va distingir per la seva actitud educada, respectuosa i amable amb companyes i companys, sense comprometre mai la seva competència professional.

Considerem necessari pronunciar-nos en aquest moment, ja que s'acusa de comportament inadequat una persona que va morir fa sis anys i mig i, per tant, no es pot defensar.

Desitgem deixar constància de com era César al seu entorn laboral, tant amb nosaltres com amb la resta de companys: un professional íntegre. 

Les firmants: Cristina Savall, Imma Fernández, Sonia García, Carmen Umbón, Marta Cervera, Mireya Roca, Marta López, Pepa Roma, Rosa Mari Sanz, Carmen Suárez, Natàlia Farré, María Ángeles López, Rosa Massagué, Mireia Armengol, Carmen Jané, Cristina Camarero, Inés Álvarez, Inma Santos, Gemma Tramullas, Olga Puig, Blanca Espacio.

15 ene 2025

Respeto y cariño para César López Rosell

Sonia García García*
Conocí a César López Rosell en el año 2003. Fue mi jefe en la sección de cultura de 'El Periódico de Catalunya', cuando llegué a Barcelona. Aunque venía de dirigir un periódico en México, no tenía las herramientas necesarias para trabajar en ese gran diario. César me ayudó en la adaptación a esta nueva forma de ejercer el periodismo.

Con respeto y cariño me enseñó quizá lo que la universidad y mi
César López Rosell.

propia experiencia todavía no me proporcionaban, además de que me introdujo en el mundo periodístico y cultural que lo rodeaba, presentándome a compañeros y compañeras de otros medios, enviándome a cubrir noticias, incluso a la presentación de documentales de Montserrat Armengou, destacando el valioso trabajo de esta periodista.

Gracias a César, mi paso por la sección de cultura fue más amable y pude compartir el trabajo y las risas con compañeros y compañeras con las que aún mantenemos la amistad. También fui testigo de la relación espontánea y cordial que sostenía con otras mujeres.

Algunos meses después de entrar a 'El Periódico de Catalunya', conocí también a su estimada esposa, Esperanza Navarrete, a quien el periodista adoraba. Seguimos relacionándonos incluso después de su jubilación en el diario.

Estaba en México cuando ocurrió su deceso y lo único que hice fue compartir la sentida noticia que escribió otra gran periodista Marta Cervera. Mi reconocimiento a una gran persona.

*Periodista, escritora y gestora cultural

13 ene 2025

El César que yo conocí

Carmen Umbón
El pasado domingo, 12 de enero, mi apreciado colega y excompañero de 'El Periódico de Catalunya' durante muchos años Josep Maria Ureta explicó clara y detalladamente en este mismo espacio cómo se había generado la información que ha contribuido al descrédito de nuestro común amigo César López Rosell. No repetiré lo que ya se ha dicho ni quiero entrar en una discusión genérica sobre la oportunidad que ofrece el #MeToo para saldar cuentas antiguas y liberar a muchas mujeres del insoportable peso que ha supuesto en sus vidas el acoso sexual que sufrieron en el pasado, especialmente el que se desarrollaba en el marco laboral.

Simplemente, quiero explicar que en los muchos años que
convivimos en 'El Periódico de Catalunya', César siempre tuvo actitudes respetuosas hacia todos y todas las compañeras de trabajo, cualquiera que fuese su estatus en el colectivo. Y digo convivir porque pasábamos allí muchas más horas que en casa con nuestras familias. César era persona cercana y afable a la que siempre podías pedirle un favor sin que eso representara riesgo de una contrapartida de ningún tipo. Nunca vi ni sospeché que pudiera haber el menor intento de propasarse con una colega, porque en caso de haberlo visto hubiera intervenido, y además sin correr ningún riesgo. Mi condición durante años de miembro del Comité de Empresa me protegía en ese sentido y estimulaba mi natural carácter reivindicativo.

Por eso mantenerme neutral en estos momentos me parece no sólo una deslealtad hacia mi amigo y su familia sino un grave perjuicio a la verdad, que no contribuye precisamente a esclarecer los muchos agravios que se produjeron en aquellos años en todos los ámbitos de la sociedad, que después también han seguido pero mucho más visibles y con más recursos legales y sociales para hacerles frente.

Y como lo cortés no quita lo valiente, atribuir comportamientos inadecuados a una persona que ya ha muerto y no puede defenderse me obliga a mí, que fui testigo de un comportamiento impecable durante muchos años, a manifestarlo públicamente.

En honor a la verdad, como mujer trabajadora estoy satisfecha de que el movimiento #MeToo haya contribuido a visibilizar los problemas de acoso y a dar satisfacción a mujeres que en el pasado nunca hubieran sido escuchadas. Al contrario, acostumbraban a ser vilipendiadas y castigadas por su osadía. Pero al mismo tiempo temo que el movimiento se desvirtúe y dé lugar a otro tipo de excesos.

12 ene 2025

#MeNeither

Josep-Maria Ureta
El dia 10 de gener els diaris anaven plens d’una trobada de dones periodistes que denunciaven “les agressions sexuals dins la professió”, segons el titular del diari 'Ara' del dia 11. Del tema se’n varen fer ressò TV3 i altres mitjans audiovisuals. El punt d’inici va ser una declaració pública de la periodista Ana Polo contra el seu antic cap a la ràdio Quim Morales quan ella era becària a RAC1. El mateix assenyalat, val a dir, va fer un reconeixement força confús al venir a dir que no se n'havia adonat.

Deixo constància prèvia de tres dades. Una, que els fets
narrats d’aquesta mena sovint varen passar fa temps, tot i que no és el cas concret del que faig esment més amunt. Dues, que s’utilitza la paraula “denúncia” en sentit figurat, atès que és un terme rigorosament jurídic: una denuncia es fa davant la policia, la fiscalia o els jutges/jutgesses. I encara una tercera dada que aporten les periodistes denunciants i que em sembla més rellevant: “Un estudi de Mèdia.cat sobre violències masclistes a la professió [de periodista] conclou que més de la meitat de les periodistes catalanes, un 54% han patit assetjament sexual a la feina al llarg de la carrera.”

Dit de manera poc precisa, si les redaccions actuals dels mitjans a Catalunya estan compostes, més o menys, de mitat homes i mitat dones (dada meva intuïtiva, no contrastada), caldria deduir que les redaccions son un autèntic perill per a les dones. Deixo de banda el fet, ben palès, de que la jerarquització en les feines sí presenta un biaix ben cridaner a favor dels homes.

D’entrada, en un tema que es tan greu i que val molt la pena que es debati, em sembla que les dades aportades mereixen moltes més precisions, des de quins casos abasta el concepte “agressió sexual” fins les concrecions cas per cas i com varen passar i els testimonis-proves que es poden aportar. No hi ajudarà gaire que es parli sobre coses passades anys o dècades enrere, com explico tot seguit.

Cal afegir-hi, i és la meva voluntat expressa d’esmentar-ho aquí, un missatge en xarxes socials de la periodista Montserrat Armengou que diu: “Fa dos anys vaig publicar el meu #MeToo. Avui, gràcies a companyes periodistes valentes poso nom: César López Rosell. 'El Periódico'. Jo tenia 21 anys i un contracte d’estiu que em feia treballar fins tard o molts caps de setmana a una redacció solitària. Ell sempre allà, a punt, arrambant”.

Tres dades més. Una, elemental: jo també he estat treballant tots els caps de setmana en una redacció “solitària” (¿?) del diari 'Hoja del Lunes'. Dues: com a tantes i tantes redaccions de diaris, la feina s’acabava de matinada. I tres: l’expressió “solitari” és equívoca: si pretén que només eren ella i el Cèsar, és inversemblant. Pot ser matinada, però rarament queden només dues persones.

Deixo constància també d’una dada que no encaixa prou bé: els fets descrits per Armengou varen passar fa més de 40 anys, no pas abans d’ahir. El text de les periodistes que denuncien ara assetjaments fa referència, és evident, a temps molt posteriors.

I ja posats a fer polèmica: ¿de debò ens hem de creure que cap periodista home, ¡cap!, se n’ha adonat d’aquestes situacions i si ho ha fet, s’ha quedat tan tranquil? Inversemblant, injust i --n’he estat testimoni personal en uns quants casos-- és fals.

En tot cas, la singularitat del cas recent que citem i que em mou a escriure aquestes línies amb molta tristesa i desgrat, és que es fa esment d’un company que va morir el 2018 i no es pot defensar de l’assenyalament. No té precedents, es traspassa una línia molt delicada (acusar sense proves) i s’ha afectat i de quina manera als parents més directes del Cèsar.

Mai hauria entrat en un tema del que no domino les pautes de com afrontar-lo, però sí que estic segur que formo part del suposat només 46% de periodistes mascles que no va a treballar amb intencions libidinoses. Al contrari: al llarg de la meva vida professional he tingut de 'jefa' a gent tant competent i empàtica com Carme Pàez, Montse Nebot, Rosa Marqueta, Rosa Massagué, Neus Tomàs o Olga Grau, i moltes altres com a companyes quan jo era el cap. Per tant, deixo clar que enfront del “#MeToo” també hi ha gent que podem dir “#MeNeither”. Ni estem organitzats ni crec que sigui gens aconsellable aquesta actitud.

Tanmateix, la casualitat ha volgut que el mateix dia que es varen difondre els fets “denunciats” per la redactora Armengou, una escriptora transparent, d’empenta i poc amiga dels tòpics, Empar Moliner, va escriure:

“Tinc molts dubtes sobre el què considerem agressió sexual, o comportament inadequat o directament fastigós. (...) Fa molts anys, molts, que m’arrossego pels mitjans i he vist de tot. Dones assetjades titllades de putes, perquè si tenien tal programa era pel fet que s’hi havia posat bé, mai pels seus mèrits. Però homes (nois) assetjats o seduïts també n’hi ha hagut. I molts. (...) En aquest món de competència i egomania, el més dolorós, segurament, és el setge laboral. I els crits, els insults als treballadors (la majoria amb contractes precaris) per part de les estrelles de torn, fins fer-les plorar, fins a fer-los desitjar no tornar mai, les paraules sibil·lines i cruels, les desqualificacions en públic, l’abús que fa la pèrdua de confiança en un mateix, i que han estat el pa de cada dia fins no fa gaire, us ben asseguro que no té gènere. Ho han fet homes i dones a homes i dones”.

Aquesta darrera frase mereixeria majúscules.

HO SUBSCRIC TOT, gràcies Empar.

8 ene 2025

Els errors de l’entrevista a Enric Cirici per Saül Gordillo. La memòria és enganyosa

Maria Favà Compta
La direcció del diari 'El Punt-Avui' ha encomanat a Saül Gordillo una sèrie d’entrevistes als fundadors-comptepartícips del diari 'Avui'. Els treballadors del diari ja han protestat pel fet que Gordillo, una persona condemnada per delictes sexuals, continuï col·laborant en el mitjà. L’empresa ha menystingut les raons dels treballadors i Joan Vall Clara ha defensat Gordillo a peu i a cavall. Jo també, com a fundadora, comptepartícip i exredactora de l’Avui, m’adhereixo a la protesta dels meus antics companys.

En la primera entrevista que va publicar Gordillo en l’edició del 5 de gener he detectat unes pífies que no sé si atribuir-les a l’entrevistador
Un dels comptes de participació per a fundar el diari 'Avui'.
 o a l’entrevistat, Enric Cirici, que el 1975 era el vicepresident de l’empresa editora Premsa Catalana SA. Cirici complirà enguany noranta-quatre anys. Ja sabem que la memòria és enganyosa. “Un gran cementiri”, que deia Manuel Ibáñez Escofet. I més quan hom es fa gran i tendeix a barrejar els records.

Els comptepartícips van ser els primers finançadors del diari abans que surtis publicat el primer número. És una figura jurídica medieval coneguda com a “comptes de participació”. Avui en diríem capitalisme popular o verkami.

Anem a l’entrevista. Quan Cirici parla de la primera redacció de l’'Avui' deixa anar una animalada que per extensió afectaria tot el col·lectiu professional d’aquells anys. Cirici afirma que els periodistes de la primera època no volíem escriure a màquina i exigíem secretàries per tal que passessin en net els que nosaltres havíem gargotejat a mà. Això és surrealista. La mitjana dels periodistes que vàrem començar a l’'Avui' teníem vint-i-cinc anys i el cul pelat d’escriure a màquina en les redaccions d’on procedíem. ¿Fins on hem de retrocedir per trobar taules de redacció amb tinters i plomes, senyors amb visera i manegots? Les poques vegades que vaig veure el senyor Cirici per la redacció sempre em va semblar que s’ho mirava tot des de dalt. Com si tingués un rei al cos. I potser per això no es va fixar que tots estàvem davant d’una màquina d’escriure. O s’ha confós amb els fotogrames de la pel·lícula 'The front page' ('Primera plana'), on Billy Wilder recrea una redacció de Chicago de 1929.

Afirma que “Espar Ticó va tenir la idea de fer el primer diari català després de la guerra”. Tampoc és cert. Només cal llegir les memòries de l’esmentat Ibáñez Escofet, el mateix Espar Ticó o d’altres periodistes veterans per desmentir aquesta badada. Més endavant diu que la paperassa del permís del diari es va aconseguir el mateix dia de la mort de Francisco Franco i mentre el funcionari que posava el segell deia “muerto el perro, muerto la rabia”. Això és una simplificació que tampoc no s’adiu amb la realitat. Qui va anar 40 vegades a negociar amb Madrid va ser Jaume Vilalta. Del juny al novembre de 1975 anava a cada setmana al Ministerio de Información y Turismo i mentrestant el ministre del ram, León Herrera, va fer una visita a Barcelona. I aquí van ser diverses persones les que hi van preguntar pel permís de l’'Avui' entre elles Josep Maria Cadena, Carles Sentís, Margarita Rivière... Fins i tot Rodolfo Martín Villa, el "mayor amigo de Cataluña", va ficar-hi cullerada. I el ministre semblava que s’hi posava bé. Però la realitat és que Vilalta tornava sempre de Madrid amb les mans buides. També va tornar decebut el 20-N, però ell va continuar insistint i el 22 de novembre li van acceptar finalment tota la paperassa. Però aleshores va caure el ministre i aquí va entrar en acció Carles Sentís que en aquells moments era el president de l’Associació de la Premsa de Barcelona. Però volia plegar i Josep Maria Cadena li va demanar que abans de marxar fes una última gestió. I Sentís, que també coneixia el nou ministre, Adolfo Martín Gamero, li va contestar que ja ho havia fet i que el dia de sant Francesc de Sales, el 24 de gener de 1976, Gamero aniria a Barcelona i es faria oficial el permís de sortida del diari. El que no explica l’entrevistat és que els promotors de l’empresa no van voler anar a l’acte oficial de lliurament del permís. I Cadena va haver de recollir l’autorització en solitari.

Cirici no recorda aquest acte de covardia per part de l’empresa. I, en canvi, suggereix que Josep Faulí, que va ser el primer director de l’'Avui', era un covard. No entraré aquí a valorar els primers temps de l’ 'Avui', o si el director volia fer 'Le Monde' o el 'Corriere della Sera', o si es va equivocar molt o poc en aquells primers temps. Però el que tinc clar és que en Faulí era un home molt valent, que havia lluitat en la clandestinitat, que defensava els seus redactors com pocs directors ho han fet i que era capaç d’enviar a la paperera la carta d’un tinent d'alcalde que demanava el cap d’una redactora de municipal. El vaig veure plantar cara més d’una vegada als qui manaven. La seva valentia va quedar ben patent en aquella primera i mítica portada de l’'Avui' que s’obria amb la vaga del metall i amb l’acudit del Cesc que demanava l’Estatut. Una temeritat en aquells temps tan fràgils.

L’entrevista continua valorant altres episodis cabdals dels anys seixanta i setanta com el 'cas Galisonga', la Nova Cançó, els fets del Palau,... però no seré jo qui faci una lectura crítica d’aquests esdeveniments perquè només tocaria d’orella. En canvi, la sortida de l’'Avui' i la seva llarga agonia les vaig viure en primera persona. I també vaig tenir ocasió, 40 anys després de 1976, de publicar el testimoni d’altres promotors, comptepartícips, directors i redactors del diari que encara eren vius.

2 ene 2025

Trump, el gran enemigo de la prensa, no ganará la batalla

Manuel López
Hemos leído en 'El País' que Trump, el presidente electo de los Estados Unidos, se ha proclamado enemigo de la prensa. Eso es algo que ya se intuía, pero es peligroso saber que, a pesar de su gran victoria en las recientes elecciones presidenciales, Trump no ha modificado un ápice su opinión.

Ser enemigo declarado de la prensa es síntoma de una persona
cerrada, posiblemente inculta, poco preparada desde la infancia y la juventud para asumir un papel de persona madura, preocupada por lo que pasa en el mundo. Una persona que debe saber que no está sola en nuestro planeta y que, como es lógico, lo que afecta al mundo nos afecta a todos. Y al revés, lo que afecta a uno, afecta a todos.

No vamos a hablar del efecto mariposa, eso de que aleteo de semejante lepidóptero puede provocar catástrofes en la otra punta del planeta. Es toda una verdad que cualquier decisión de un dirigente, o un líder, puede llevarnos a la destrucción total.

Aterra pensar que personas como el presidente de Corea del Norte, o el presidente de Irán, o Putin, e incluso Macron --cada vez más belicoso--, tienen en sus manos la posibilidad de hacer detonar una o decenas de bombas nucleares. Y ahora mismo, cuando escribimos este artículo, aterra pensar que Trump tendrá, a partir de enero, la maleta atómica a su lado a lo largo de las 24 horas del día y durante todos los días de la semana.

La prensa se ha convertido en enemiga del presidente electo en un momento en que aquella está de capa caída. Las tiradas no hacen más que bajar. La publicidad se pasa al lado digital. Los jóvenes no suplen a los lectores mayores.

Es verdad que la prensa tiene que hacer una severa reflexión sobre su estado actual. No podemos defender un modelo de periódico, en 2024, que sea igual al de hace veinte años. Con lo que ha llovido, la prensa apenas ha experimentado cambios.

Se ofrecen suplementos de moda lujosos, suplementos de literatura, el deporte está cada vez más omnipresente en los papeles, contamos con grandes escritores y opinadores, pero así, y todo, la prensa no acaba de levantar cabeza. Y, encima, se le pone en contra todo un presidente de los EEUU.

Pero es bueno que Trump haya visto en la prensa un enemigo, o una enemiga.

Si, lo es porque la fortalece: he ganado las elecciones, pero he perdido a la prensa, podría estar pensando en estos momentos. Y tendría toda la razón.

¿Por qué nos alegra esa oposición frontal a los diarios? Porque los ciudadanos, las lectoras, el pueblo, en general, no son tontos. Pueden haberle votado, pero la gente necesita, siempre, un contrapunto al poder político, y ese contrapunto lo ofrece la prensa. y también la televisión, pero menos.

Trump puede tomar decisiones drásticas en numerosos ámbitos que nos afectarán a todos, no solo a los norteamericanos. Pues bien, esas decisiones no siempre serán acertadas ni explicadas. ¿Quién le llevará la contraria? ¿Quién le dirá al rey que está desnudo? La prensa, sin duda alguna.

Vamos a ver venir una auténtica batalla por hacerse con los medios escritos. Es más que posible que Elon Musk adquiera algunas cabeceras, quizás, incluso, las más importantes. Pero quedan muchos diarios y revistas que no podrá comprar ni Trump cerrar.

Hablamos de la prensa regional, de la prensa local, de esos boletines hechos con poco dinero por colectivos sociales, desde entidades de minorías raciales a grupos de vecinos y vecinas. De publicaciones espontáneas que nacen un día y mueren al cabo de poco tiempo, pero que durante su existencia han dado vigor al debate social.

Hay esperanza en tener enemigos poderosos. Y aquí podría venir a cuento una cita de Séneca ('Tiestes', 388): “Rex est qui metuit nihil, rex est quique cupiet nihil; hoc regnum sibi quisque dat”, que traducido viene a decir: “Es rey quien nada teme, es rey quien nada codicia; esta soberanía se la da cada cual a sí mismo”